Imatges de pàgina
PDF
EPUB

los cortesanos de la península, y á los magistrados de América que solo debia buscarse la conversion de los Indios por medio de una predicacion pacífica, y aislada sin soldados ni guerra..

Habiendose creado una silla episcopal en Nicaragua, y nombradose por primer obispo á don Diego Alvarez de Osório á quien se concedio titulo de protector de los Indios en 1527, quiso este buen prelado tener á su lado á fray Bartolomé por su principal cooperador en el mínisterio episcopal. El religioso aceptó con licencia y aun mandato de su prelado (prior de la isla española de Santo-Domingo ); y juntamente con otros fundó en Nicaragna un convento de su orden, cuyos individuos sirvieron infinito para la propagacion del evangelio en aquella provincia, y para la diminucion de vejaciones con que los infelices Indios solian ser mortificados (1).

Desde allí fue á predícar en la provincía de Guatemala donde convirtió y bautizó inumerables Indios, y despues pasó con otros religiosos dominicos á la de Vera-Paz donde hicieron otro tanto logrando, que los habitantes de 48 leguas en largura y 27 de anchura se sometiesen voluntariamente al rey de Castilla sin que hubiesen entrado conquistadores algunos; egemplo que despues citó el mismo Casas al Consejo de Indias año 1550, en las disputas con

(1) Herrera: dec. 4, lib. 1, cap. g.

Juan Jines de Sepulveda, diciendo : « Iten debería » mas saber del hecho el doctor, que nunca los In» dios jamas hicieron mal á Cristianos sin que pri» mero muchos agravios e daños incomparables hu>>biesen recibido dellos. Ni aun en este caso jamas >> ofendieron á frailes cuando eran certificados de » la diferencia que habia dellos á los seglares y del >> fin que pretenden los unos al que buscan los » otros; porque son por la mayor parte, de su na>> turaleza pacíficos, mansuetísimos é inoxios. Iten » deberia de advertir el doctor mui reverendo, que >> no es cosa razonable niproporcionada con dis>> crecion querer apaciguar y hacer camino para » predicarles yendo tiranos con egército cruel e turbu» lento á los que están en excesiva manera escanda»lizados, agraviados, y asombrados de los males » y estragos que han padecido; sino de las mas pro» pincuas tierras ó provincias donde hay pueblos de »Españoles, los religiosos por medio de Indios pa>>cificos que ya conocen y tienen experiencia, y »confianza dellos, negociándolo; como hicimos » nosotros los frailes de Santo-Domingo que desde S »Guatimala con esta industria trajimos de paz, y

hemos convertido (á donde hay hoy, á gloria de » Dios, maravillosa cristiandad, la cual ignora el »mui revevendo doctor) las provincias que por » esta causa mandó nombrar el principe, de la VeraPaz; las cuales por las guerras injustas que les » habian los Españoles hecho, estaban con mucha

♦ razon y justicia, bravísimas y alteradísimas; y el » primero que entró en ellas y las apaciguó, fue el » bien aventurado fray Luis que matáron en la Flo» rida de cuya muerte se quiere ayudar el reverendo doctor Sepulveda. Pero aprobechale poco porque » aunque matáran á todos los frailes de Santo-Do>>mingo y á San-Pablo con ellos, no se adquiriera » un punto de derecho mas del que de antes habia » que era ninguno contra los Indios; porque en el » puerto donde lo lleváron los pescadores marineros » (que devieran desviallo de alli como iban avisa»dos) han entrado y desembarcado cuatro armadas » de crueles tiranos que han perpetrado crueldades >> extrañas en los Indios de aquellas tierras, y asom»brado, escandalizado, é inficionado mil leguas de » tierra; por lo cual tienen justísima guerra hasta el » dia del juicio contra las de España, y aun contra » todos los cristianos: y no conociendo á los religio» sos, ni habiendolos jamas visto, no habian de >> adevinar que eran evangelistas, mayormente yendo » en compañía de aquellos que á los que tantos males »é jacturas les han hecho, eran en gestos y en ves>> tidos y en las barbas y en la lengua semejantes y » veian comer y beber y reir como naturales amigos » juntos. Y si los marineros llevárán al dicho padre » fray Luis (Cancer) á la parte donde aquí habia>>mos comunicado y determinado, y el santo lle>> vaba delante sus ojos, no lo matáran, como parece » que los otros religiosos sus compañeros requi

» riéron al piloto que los pusiese mas abajo, ó mas >> arriba en otras provincias; y echando achaques » que primero querian ir á tomar agua á la isla de » Cuba, dió con ellos en la Nueva-España donde » hacer otra cosa no pudiéron ». Torquemada refiere otro suceso igual en Yucatan por medio de frailes franciscos de lo cual tomó testimonio Casas , у presentó en la Corte de España (1).

lo

Hizo fray Bartolomé otras muchas expediciones apostólicas en diferentes provincias del imperio de Mégico, y en una de ellas adquirió de fray Andres de Olmos religioso franciscano un libro escrito en lengva megicana por un Indio idólatra. El contenido era una coleccion de exortaciones de una madre á su

hija para persuadir la práctica de las virtudes morales. Fray Juan de Torquemada en su Historia de Nueva-España, ó Monarquia indiana dice que él adquirió este libro, y que ni Casas, ni Olmos, ni él pudiéron traducir con exactitud las metáforas que habia usado el autor original en su lengua megicana (2).

[ocr errors]

Dicen algunos que fray Bartolomé vino á España en el año 1530, para impedír que se hicieran esclavos en el Perú y que lo consiguió con otras leyes utiles á los Indios; pero don Francisco Pizarro marques de Charcas no conquistó el Perú hasta el año

(1) Torquemada: Monarquía indiana, t. 3, lib. 19, cap. 13. (2) Torquemada: Monarquía indiana, t. a, lib. 13, cap. 36.

1531 la ley de no hacer esclavos estaba ya dada mucho tiempo antes y recomendada diferentes veces, aunque nunca bien obedecida : las otras leyes particulares para el Perú no se diéron hasta 1534 con ocasion del viaje de Hernando Pizarro á Castilla (1).

Esto no obstante, Torquemada nos dice que fray Juan de Zumarraga religioso francisco, primer obispo de Mégico, vino á España en 1532, pero que antes él y otros religiosos habian escrito al rey en favor de los Indios para que no fuesen dados por esclavos y que esto mismo solicitaba en Corte el obispo de Chiapa don fray Bartolomé de las Casas y se firmó la provision por la emperatriz año 1536, antes que llegára el obispo de Mégico (2).

Lo cierto es que fray Bartolomé se hallaba de vuelta de su quinto viaje en la ciudad de Santo-Domingo de la isla española en el año 1533 en que se hizo la paz con el Cacique don Enrique que habia estado haciendo guerra por espacio de muchos años de resulta de las injusticias hechas por las autoridades españolas contra él y contra los Indios de su tribu de otras aliadas. Fray Bartolomé amigo antiguo suyo, fue á verlo, y le dió tan buenos consejos que se consolidó la paz; llevó á sus Indios á la villa de Azuá; predicó á todos; bautizó á muchisimos que no habian recibido aun el bautismo, les dijo misa,

(1) Herrera dec. 5, lib. 6, cap. 13.

y

(2) Torquemada: Monarquia indiana, t. 3, lib. 20, cap. 30.

« AnteriorContinua »