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BALANCERO. (Tecnologia.) (Véase BALAN

BALANCEROS. (Entomologia.) (Véase BALANCINES.)

BALANCIN. Se da este nombre en una máquina á cualquiera de sus partes que tenga un movimiento oscilatorio, y sirva para arreglar ó hacer mas lento el movimiento general: igualmente se aplica la misma denominacion á un mecanismo destinado á producir por un movimiento alternativo una fuerte presion en intérvalos muy próximos.

men. La forma y la magnitud de los balancines varian segun los géneros y las tribus muy largos en las típulas y los mosquitos, de mediana longitud en los tábanos y los asilos, son muy cortos en los estres y los hipobosques. Ora desnudos, ora cubiertos por otras dos piezas membranosas, que se llaman aletas ó cucharillas, su desarrollo se halla en razon inversa de estas últimas piezas, asi es que no se ven en los tipulargos, que tienen los balancines muy desarrollados.

La persistencia de los balancines en todos dícteros anuncia que estos órganos tienen una verdadera importancia, pero los autores, lejos de hallarse conformes acerca de las funciones que les están asignadas, ni siquiera están acordes acerca de la parte del cuerpo de donde toman origen.

Los balancines de los relojes ó de los pén-los dulos (véase esta palabra), los de las máquinas de vapor (véase esta palabra), pertenecen á la primer clase de balancines, y los que se usan para acuñar las monedas, que tambien reciben el nombre de volantes, entran en la segunda. (Véase MONEDAS.)

Nos falta el suficiente espacio para entrar El balancin hidráulico es una máquina de en detalles anatómicos, que por otra parte caforma varia, à la cual una corriente de agua | recerian de interés para el lector: nos limitala imprime un movimiento de bȧscula. Per-remos por tanto á dar á conocer las principarault es el inventor de este aparato, mas inge-les opiniones emitidas acerca del uso de estos nioso que útil, puesto que se pierde una con- apéndices. siderable cantidad de fuerza. Belidor le modificó, otros ingenieros se ocuparon de perfeccionarle, y se conocen en la actualidad varias especies de balancines hidráulicos. Haremos la descripcion del que fué inventado de muy pocos años á esta parte por Mr. d'Artigues.

La mayor parte de los entomologistas creen que están destinados, como lo indica su nombre, à mantener el insecto en equilibrio durante el vuelo. Algunos, y Olivier entre otros, son de parecer que únicamente sirven para facilitar el vuelo de los dicteros, y para reemUna balanza de brazos iguales tiene adap- plazar al segundo par de alas de que estos intado en cada una de sus estremidades un cubo sectos están privados. No falta quien pretenen forma de cilindro ó de paralelipedo, que da que los balancines juntamente con las aleabierto lateralmente cerca de su fondo, puede tas producen el zumbido que la mayor parte subir y bajar en una especie de vaina ó estu- de los insectos de este órden dejan oir en su che de piedra, contra el que se roza con pre- vuelo. Por último, la opinion mas probable, cision. Cuando uno de los dos cubos llega a lo aunque hipotética, opinion que tiene en su faalto, se llena levantando una válvula que da vor á La Treille y Mr. Lacordaire, es que los salida al agua á un depósito; resultando asi balancines tienen alguna analogía con la resmas pesado, desciende por su cañon ó estu-piracion, y pueden contribuir á hacer abrir che, determinando de este modo la estension y cerrar los estigmas posteriores del torax. del otro cubo. Pero como al llegar á la parte BALANDRA. (Marina.) Embarcacion pequeinferior el tubo presenta una abertura corres-ña de un solo palo.

pondiente à la lateral que en él está practica- BALANDRAN. Especie de sobretodo ó vestida, el agua, que detenida hasta entonces por dura talar ancha que no se ciñe, y de la cual las paredes del estuche no habia podido esca- por la parte que cubre los hombros, penden parse, se derrama, y en el instante, el segun- unas mangas cortas. Hácense de tela de lana do cubo, al tocar en la parte superior, se lle-ỏ seda, y úsanlos especialmente los eclesiástina precisamente como el primero, pero hacia cos dentro de casa. Este trage es muy anel lado opuesto, cae entonces á su vez, y le-tiguo. vanta al que acaba de vaciarse, siendo asi co- BALANO. (Anatomia.) Del griego Baλavos, mo se perpetua el movimiento de vaiven. bellota. Llámase balano ó glande por su figuPara que el movimiento vertical de los ra glans penis), el remate anterior del miemcubos se efectúe con mas precision, las cuer-bro viril. Forma un cuerpo rehenchido, redas suspensoras se enrollan sobre arcos de dondo, triangular, conoideo, terminando por circulos que llevan las dos estremidades de la atrás en un redondel llamado corona (corona palanca. glandis), que le cerca por entero, y por delanBALANCINES. (Entomologia.) Halteres li-te en una hendidura longitudinal, que es el bramenta. Son dos pequeños apéndices membranosos, movibles, muy delgados y mas o menos largos, insertos bácia cada lado del melatorax de los dicteros (moscas, tipulas, mosquitos, tábanos, etc.), en el ángulo for- BALANOS, balanus. (Balanos, bellota.) Cirmado por la union del corselete y del abdó-ripodos.-Este género de la familia de los ba

orificio esterno de la uretra. La porcion angostada que hay detrás del glande, es su cuello. El balano está ordinariamente medio cubierto por la piel del prepucio.

lanidos, habia sido considerado hasta el dia como correspondiente á los moluscos, pero algunos trabajos recientes de Mr. Martin-SainAnge, han demostrado de una manera positiva, que los balanos y los demas géneros cirripedos, son verdaderos animales articulados, que constituyen una clase aparte, à la cual quiere distinguir el mencionado naturalista con el nombre de cirripedianos. Los caractéres de este género, son: animal cónico, deprimido ó cilindroide, semejante à las anatifas, pero desprovisto de pediculo, con las branquias en forma de alas insertas en la faz interna del manto. Concha cónica, muchas veces doblada interiormente, mas o menos alta, constituida por seis distintas valvas, articuladas entre sí, con un sustentante calcáreo, plano y bastante espeso, aunque a veces carece de él. Opérculo piramidal, oblicuo, compuesto de cuatro valvas triangulares, de las que las dos mas pequeñas presentan una cavidad derecha y aplastada.

Los balanos eran conocidos de los antiguos, los cuales, admirados de su tosca semejanza con la bellota de la encina, le han dado el nombre que actualmente lleva. Aristóteles apenas hace mencion de ellos, en lo cual se deja ver que no habia tenido ocasion de estudiar estos animales; pero Ateneo los describe de talladamente, y dice que los procedentes de Egipto eran los mas estimados. Macrobio tambien los menciona como un manjar esquisito; y aunque son poco nutritivos, en todos lugares y tiempos han formado parte de la alimentacion. Runpfius asegura que la especie mas estendida, el balanus tintinnabulum, llamado vulgarmente la bellota de mar, el tulipan, el turbante, etc., es mirado en la China como un manjar esquisito, que se adereza con sal y vinagre; añadiendo que este mismo molusco despues de cocido, tiene un sabor que se asemeja al de la carne de cangrejo.

Los autores antiguos aunque confundiendo las anatifas con los balanos, distinguian estos últimos con el nombre de bellotas, de donde procede el nombre de bellota de mar, aplicado por los primeros metodistas.

que pudieran existir entre sus sistemas, han conservado el género balanus libre de toda mezcla. Sin embargo, mucho nos resta aun para alcanzar una determinacion perfectamente establecida, y una buena sinonimia de las especies vivas, y la mayor confusion reina entre ellas, sin que se esceptúen las mas comunes.

Los balanos se adhieren á la superficie de las rocas, de las piedras, de las conchas de los crustaceos, de las plantas marinas y de los cuerpos flotantes, aunque sin penetrar en ellos, y tapizan algunas veces en tan gran número los costados de los buques, hasta el punto de perjudicar á su rapidez. Encuéntranse siempre reunidos en grupos considerables, y tan apretados los unos contra los otros, que su forma resulta irregular.

La fecundidad de los balanos es prodigiosa; ponen sus huevos en el estio; y segun el testimonio de Poli, al cabo de cuatro meses ya los jóvenes son aptos para la reproduccion. Durante su primera juventud, la concha de los balanos casi esclusivamente consiste en el opérculo.

En el agua, los balanos agitan continuamente con gran velocidad sus brazos cerdo. sos; los mas largos sirven para formar un remolino donde se sumen los animales que constituyen su alimento, mientras que los mas pequeños retienen la presa que procura escapar. Al menor amago de peligro, todo este movimiento se interrumpe, y los balanos retiran sus brazos y cierran sus opérculos.

El número de las especies que constituyen este género es dificil de determinar, porque existen en todos los mares tanto polares como ecuatoriales, y las mismas especies se encuentran en parages muy remotos; por manera que no es fácil asegurar si son indigenas las que poseemos en nuestras costas: se han dividido los balanos en dos grupos segun que tienen ó no un sustentante calcáreo.

BALANOS Ó BALANUS. (Botánica fanerogámica), sinónimo de moringa. Este nombre ha sido dado por Burman (Zeilan, 316, De Candolle Mem Segumin., t. XXI: Prodr., II, 478, No obstante la gran desemejanza que les R. Brown ad Denhan 33, Decaisne, in Nov. indujo á establecer en la clase de los cirripo- Annal sc. nat. IV, 243; Wight et Arnott Prodr., dos, una division tan natural y tan bien justi-I, 478), á un género incluido por Decandolle ficada, Lineo los reunió con los anatifas en en la tribu de las casideas, de la familia de las su género lepas, formando con los oscabriones leguminosas-cæsalpinias, y que R. Brown cony las foladas, sus testacea multivaldia. Bru-sidera como debiendo formar el tipo de una guieres fué el que dió á los balanos el lugar nueva familia, las de las moringeas, de que que les correspondia, formando á espensas de es todavía el único representante. Ofrece por ellos un género balanita, cuyo tipo era el ba-caractéres: cáliz con cinco divisiones oblonlanus tintinnabulum. gas. Corola de cinco petalos periginios, oblonDesde entonces publicáronse sin interrup-gos y lineares; estambres de ocho á diez, incion diferentes materiales acerca de los balanos: Polí los estudió cuidadosamente, habiendo sido el primero que hizo de ellos una buena anatomía. Cuvier vino á completar las nociones recogidas por sus predecesores, y todos los naturalistas, no obstante las desemejanzas

sertos sobre un disco cupuliforme, que envuelve la base del cáliz; filamentos conniventes en un tubo abierto en la parte anterior, libres en la base y en la estremidad, soldados en la parte media y desiguales; anteras introrsas, uniloculares y oblongas, que fijas por la parte

dorsal, se abren longitudinalmente. Ovario pe- des conquistadores de las eras mas recientes dicular, de un solo receptáculo pluri-ovulado.no abrigaron semejante designio, por mas que Estilo terminal, sencillo, dilatado en su estre-se lo hayan echado en cara las pasiones polimidad. El fruto es una cápsula en forma dese-ticas, y la ignorancia de los historiadores. licua unilocular, con tres valvas. Semillas Carlos V no pensó sino en comprimir el poder ovalares, trigonas, adheridas al centro del fru- de la Francia. Luis XIV luchó toda su vida con. to, desprovistas de albumen, con ángulos ap- tra la preponderancia politica de España y de teros ó salientes en forma de alas. Austria, y la mercantil de Holanda, y las conquistas de Napoleon, no tuvieron otro objeto quc alzar en la parte continental de Europa un poder capaz de hacer frente al imperio que ejercia la Inglaterra en todos los mares del mundo. Cuando el ministerio inglés protegió sin rebozo la insurreccion de las colonias españolas, lo que se propuso fué, segun la declaracion esplicita del ministro Canning en el parlamento, levantar un mundo nuevo que pudiese rivalizar con el antiguo.

Los moringas son unos árboles inermes bi é tripennados con impar; estipulas de cedentes; flores dispuestas en racimos paniculados. Estas plantas son originarias del Asia Tropical, desde donde se han estendido hasta el Africa y la América.

Endlicher (Gen. Plant., p. 4,324 n. 6,844), ha dividido este género en dos secciones que denomina: balanus, semillas desprovistas de alas; moringa, semillas de tres alas.

Las especies de este género suministran un aceite inodoro y que no se enrancia con el tiempo como otros muchos, y he aqui la ra-la zon porque lo hacen entrar los perfumistas en la composicion de sus esencias. Este aceite se designa generalmente con el nombre de aceite de ben, de la denominacion de la especie (moringa ben) que mas especialmente lo suministra.

Estas consideraciones destruyen la opinion de algunos escritores modernos, que atribuyen invencion de la balanza de poder à los políticos italianos del siglo XV, de resultas de la invasion de Italia por Carlos VIII. El célebre escritor inglés Hume ha combatido este error con argumentos irresistibles. Pero si es cierto que el principio fué conocido de los antiguos, es tambien innegable que su desarollo y perBALANZA DE PODER. (Politica.) Sistema feccion pertenecen á la historia moderna. Conpolítico que consiste en equilibrar hasta lo solidada la Europa entera en un sistema de posible las fuerzas y el influjo de los grandes gobierno provincial bajo el yugo de los romaestados, para evitar su respectiva preponde-nos, su separacion en diversas fracciones fué rancia, y su escesivo engrandecimiento. Este efecto de una misma causa y se verificó casi sistema no fué desconocido de los antiguos. al mismo tiempo. Aquellas fracciones, adoptaNació, como otros grandes inventos, en Gre- ron constituciones semejantes, peculiarmente cia, y fué el verdadero móvil de las prolonga- aptas à conservar la uniformidad de costumdas y sangrientas guerras entre Atenas y La-bres é instituciones que habian dominado en cedemonia, y del establecimiento de la liga ó el conjunto de que habian formado parte. Los tribunal de los anfictiones. Polibio lo define y progresos del gobierno politico han sido iguaesplica en los mismos términos que hoy lo les en todas ellas, desde el dominio de los novemos practicado por las naciones modernas bles hasta el poder absoluto de los monarcas, y en las arengas de Demóstenes se encuen- y en el último siglo, hasta la emancipacion de tran muchos pasages que comentan la teoría. los pueblos. El espíritu mercantil, que da lugar El dominio universal de los romanos puso á relaciones intimas y frecuentes, de que la término á toda idea de igualdad y de inde-antigüedad no tuvo idea, ha contribuido tampendencia en los gobiernos del mundo cono-bien á formar de los estados europeos, un tocido. Su lema está perfectamente concentrado do compacto y unido; una especie de federaen un célebre pasage de Virgilio, y durante to-cion, que siu reconocer un gefe comun, adopdas las épocas de la república y del imperio, ta las mismas reglas de conducta, obedece al desde Rómulo hasta Augústulo, toda la politica de aquella gran nacion se redujo à someter todas las naciones de la tierra á su dominio, perdonando á las sumisas, y sometiendo á las que resistian: parcere subjectis et deballere superbos. Pero apenas se desmoronó aquel grandioso edificio, el instinto de la propia conservacion indujo á los gobiernos à levantar barreras contra la ambicion de los mas poderosos, unas veces por medio de la guerra, otras por medio de las alianzas, todo con el único fin de igualar la esfera de accion de las que podrian abusar de su poderio. En los tiempos modernos solo hallamos un monarca que haya aspirado abiertamente á la monar quia universal, y fué Carlo-Magno, Los gran

impulso del mismo interés, y reconoce el mismo código de leyes internacionales. De estos manantiales, y no de la premura de un hecho aislado, no del gabinete de un ministro, debemos deducir el derecho de intervencion, que, por espacio de tantos siglos, ha arreglado los negocios diplomáticos de Europa; y la union de los estados italianos contra la irrupcion de Carlos, no fué mas que un síntoma del adelan-. to progresivo que ya en aquella época, se iba introduciendo en las naciones cultas.

Poderosamente ha influido en este adelanto la institucion de los ejércitos permanentes. Cuando los gobiernos de Europa cifraban toda su gloria en el esplendor de su reputacion militar, todo hombre libre era soldado y consa

cuando ningun peligro amenaza; los movimientos desusados de tropas, la acumulacion de fuerzas navales, y cualquier otra operacion que suponga miras siniestras y proyectos capaces de comprometer la paz del mundo. Esto es una obligacion de los gobiernos con respecto á los pueblos que rigen, y á la comu

Ahora bien, semejantes problemas no se resuelven por instinto, ni por capricho, ni por rutina: sino con conocimientos profundos: 4.o de las reglas teóricas que el derecho internacional prescribe: 2.o de las circunstancias del hecho, con el objeto de saber si ha llegado el caso de la aplicacion de aquellas reglas. La ciencia consiste en esplicar los fenómenos por doctrinas razonadas; y no es otra cosa lo que hace el hombre de estado, cuando en presencia de ciertas circunstancias, tiene que resolver si ha llegado ó no el caso de intervenir.

graba su vida á la profesion de las armas. Pero tan pronto como las artes pacificas empezaron á merecer la preferencia de todas las clases sociales, la guerra llegó á considerarse como un azote temible que interrumpia el curso de los trabajos lucrativos y amenazaba la independencia natural. Ya no se hizo la guerra sin motivo justificable, y solo por el deseo de ad-nidad de intereses que à todos ellos ligan. quirir riquezas y territorio, sino como un mal necesario, y para evitar mayores peligros. La primera gran consecuencia de esta mudanza en las ocupaciones y en el carácter de los hombres fué la separacion de las profesiones civil y militar; el encargo que recibió una de ellas de defender á las otras; es decir, la formacion de un poder militar permanente: la mas importante de las innovaciones políticas de que hace mencion la historia. Esta gran mudanza ha sido el origen de otra, no menos eficaz como promotora de la seguridad general y de la civilizacion, á saber: la ley general que las Se ha puesto en duda si legitima el uso de potencias han admitido espontáneamente, y este derecho una mudanza repentina y total en que escusa el uso de la espada, haciendo que la estructura interior de un Estado, de un ca este uso sea fatal al que injustamente lo em- rácter tal, que sus vecinos tengan bastante plea, uniendo las fuerzas de todas contra la motivo para recelar su propagacion; y, hasta que se constituye en agresora, y resolviendo ahora, la práctica general se ha resuelto por vengar y reparar toda violacion de territorio, la afirmativa. Nosotros creemos fundada esta toda usurpacion de dominio, toda hostilidad doctrina en la razon, y en el derecho de la innecesaria, no ya con los recursos de la parte propia defensa. Si un ladron se presenta deofendida, si no con los de todos los miembros lante de mi en el camino, y saca una pistola, de la gran familia europea. En esto consiste lahe de aguardar á que la monte y me la disbalanza del poder en toda su estension. La pare? ¿No estaré autorizado á atacarlo, si pueciencia que se ocupa en discutir la parte teóri- do, antes de que consume su designio? Cuando ca de este principio, y su aplicacion á los ca- una nacion vecina nuestra, alaca injustamente sos particulares, es, por consiguiente, una de á otra que es su vecina tambien, no se le las mas importantes à que puede consagrarse hostiliza por vengar á la nacion agraviada, siun hombre de estado. Se ha dicho, sin emno por el peligro que amenaza á todas las bargo, que esta investigacion no puede ser que le son fronterizas. ¿Y no podremos hacer concretada en reglas fijas; que no merece el lo mismo cuando el mal que se teme es la nombre de ciencia; que depende del capricho revolucion, la rebeldía, la negacion de toda de algunos individuos, y del imperio de los ac- autoridad ó alguna de esas doctrinas que emcidentes y de las circunstancias. Vamos á exa- ponzoñan la opinion y minan los gobiernos? minar ligeramente esta doctrina. Si á la introduccion de una de estas grandes En primer lugar, no es cierto que los go-convulsiones internas, sucede el engrandecibiernos seau tan libres como se supone, en las miento esterior, entonces la cuestion no precuestiones de politica esterior. Aun en los senta la menor ambigüidad. Tal fue el caso de estados mas despóticos, la opinion pública la Francia en 1790, cuando todas las naciones ejerce una supremacia irresistible, y no nece- de Europa, inclusa España, se armaron contra sitamos salir de nuestra historia doméstica, ella, no solo para conservar intactos sus territopara ofrecer una ocasion eternameute memo- rios respectivos, sino para oponer una barrera rable, en que la nacion decidió por sí misma á las propensiones anárquicas y al espíritu reaquel gravisimo problema, contra la voluntad volucionario que llevaban consigo los ejércitos y las simpatias de los que legitimamente la de la república. Cuando Luis XIV prodigó toda dominaban. En segundo lugar, los casos en clase de auxilios á los principes de la casa de que una nacion puede intervenir en los nego-Estuardo, no fué tan solo por favorecer aquella cios de otra, ofrecen pocas dificultades, y es dinastía, sino porque recelaba que el fanatistán ya previstos en la mayor parte de los tra- mo puritano se comunicase à la nacion frantados sobre derecho internacional, desde Gro- cesa y se repitiese en su territorio la tragedia cio hasta nuestros dias. No solo la conquista y de Carlos I. la invasion; no solo las exigencias tiránicas y Estos principios tienen sin duda sus limiexageradas, dan lugar à demandar esplicacio tes, y solo deben aplicarse en casos estremos. nes, y á empezar hostilidades, si las deman. Nadie sostendrá que el derecho de intervendas se niegan ó no satisfacen: sino un arma-cion puede aplicarse a una nacion que progre mento inmotivado en tiempos tranquilos y sa rápidamente, sea por el súbito desarrollo de

sus recursos, sea por la mudanza de leyes y de gobernantes. Defender estas demasías seria echar por tierra la independencia y la sobera nía de los Estados, cuya legitimidad ha sido re conocida. Pero no olvidemos que este reconocimiento impone deberes recíprocos, y que el cumplimiento de todo deber requiere la coaccion, que si en el derecho civil se ejerce por la autoridad, en el derecho de gentes no puede emanar sino de los que se creen ofendidos ó amenazados.

Grotius: De Jure belle et pacis.
Politique de tous les cabinetes, por Javier.
Kent: On international Lavv.
Le droit des gents, por Valtel.
The Edimbourg réview.

BALANZA DE COMERCIO. (Economía política.) Se ha dado este nombre al esceso de las importaciones con respecto à las esportaciones, ó de estas con respecto á aquellas, en un pais dado. La comparacion de estos datos, ha ocasionado uno de los errores mas crasos que han dominado en la opinion pública: error que no solo ha retardado por largos siglos la reforma de la legislacion mercantil; no solo ha contribuido eficazmente al empobrecimiento de las naciones y á la contraccion de los cambios, sino que, escitando odios encarnizados entre los gobiernos, ha provocado guerras largas y crueles, y ha costado torrentes de sangre á la humanidad. Este error consistia en creer que era del interés de las naciones tener la balanza del comercio en su favor: esto es, que no puede haber superioridad comercial sino cuando las esportaciones esceden á las importaciones, porque este esceso se equilibra en dinero efectivo, y este dinero aumenta necesariamente la riqueza nacional. La obcecacion llegó hasta el punto de creer que los pueblos

Pero si la intervencion tiene por objeto la conservacion de la paz general, ¿cómo concuerda esta opinion con la idea generalmente reci- | bida, de que hay naciones naturalmente enemigas, como las hay naturalmente aliadas? Por desgracia es demasiado cierto que las circunstancias en que algunas de ellas se encuentran las obligan á mirarse con recelo y animosidad; pero el sistema de la balanza prescribe las reglas para desarmar este mal principio, por medio de la alianza con otros, cuando una de las rivales tiene motivos para recelar un ataque ó la escesiva preponderancia de su rival. Por esto, si la Gran Bretaña ha considerado por tan largo tiempo á la Francia como su enemiga natural, tambien ha considerado como su alíada natural á la Holanda, y en otras ocasiones, á la España, al Austria y á la Pru-que carecen de minas no tienen otro medio de sia.

adquirir dinero efectivo, sino esportando maDe esta idea nace tambien la dependencia yor cantidad de mercancías que las que imporen que algunas naciones pequeñas se colocan tan. Si una nacion, dicen los economistas, con respecto á las grandes, y entonces los inte- vende á otra por valor de un millon de proreses son recíprocos: la una cuenta con la pro- ductos, y le compra por valor de dos miteccion de su superior, y ésta con los puertos, llones, claro es que tiene que pagarle un milas colonias y los recursos de la otra en caso llon en dinero, y este millon deja un déficit de guerra. Tal es la situacion mútua de Ingla-en su circulacion y un vacio en su capital. terra y Portugal, y la importancia de semejan-Por el contrario, la nacion que ha vendido dos tes clientelas, es el verdadero origen del per-millones de productos, cobra un millon en dipétuo antagonismo entre Austria y Prusia. nero, y se enriquece con otro tanto, asi pues, A pesar de todo lo que llevamos dicho, es lo que conviene es vender mucho y comprar muy probable que cada dia se haga menos ne- poco, adquirir la mayor suma de dinero posicesario el poder de intervenir, y esto se debe-ble, y no desprenderse del que una vez ha enrá á dos cansas de un carácter opuesto: á las trado en los límites del territorio. Toda la lecalamidades que la guerra ha esparcido en gislacion comercial del mundo civilizado se ha Europa durante estos últimos siglos, y al pro-fundado, por espacio de muchos siglos, en este greso admirable de las luces, de la industria principio. y del comercio. El convencimiento universal Cuatro renglones han bastado á pulveride los pueblos los arrastra como por una fuer- zarlo. La definicion de la riqueza dada por za irresistible, á detestar la guerra y á mante- Adam Smith, ha hecho ver la falacia que esner por todos los medios imaginables, el repo- taba alucinando al mundo, y ha desbaratado so á cuya sombra han de fecundar sus recur- para siempre la quimera de la balanza, ya sos. Este convencimiento obra con mas efica- harto desacreditada por sus efectos prácticos, cia que los tratados mas solemnes y la mas y por el deplorable influjo que habia ejercido astuta diplomacia. Si continúa fortificándose en la suerte de las sociedades. La riqueza se esta idea en el espíritu público, y si adquiere compone de todos los productos cambiables. bastante vigor, como ya en parte va sucedien-Ilámese trigo, paño, casa ó piedra preciosa, do, para sobreponerse á la ambicion de los todo lo que puede darse en cambio de otra copríncipes y á las intrigas de los gabinetes, el sa, merece el nombre de riqueza. No se esderecho de gentes llegará á ser una ciencia cluye el dinero de esta regla general. Como el tan inútil, como lo son la alquimia y la astro-trigo y como el paño, el dinero se da cuando logía, y el dia en que esto suceda abrirá una sobra, y se adquiere cuando hace falta. Con época de ventura en los anales de la huma- productos naturales ó manufacturados, nidad. compra lo que se necesita, y por consiguien

se

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