NOTICIA HISTÓRICA DE LA ACADEMIA, Ó RESUMEN DE SUS ACTAS, desde el año de 1821 hasta concluir el de 1831, LEIDO EN SUS JUNTAS DEL MES DE MARZO DE 1832. El tomo VI de las Memorias de la Academia, publicado en el año de mil ochocientos veinte y uno, se habia consagrado exclusivamente á la ilustracion de nuestra historia durante el glorioso reinado de los Reyes Católicos. Esta parte importante de nuestros anales, en que la nacion española, dirigida por una muger, aparece de repente como un coloso entre los demas estados, y sale al teatro del mundo político á hacer el primer papel entre los pueblos de Europa, merecia sin duda alguna particular consideracion y examen. Desde aquel tiempo la Academia ha continuado las tareas propias de su instituto bajo la direccion, primero del excelentísimo señor Marqués de santa Cruz, y despues de los señores don Antonio Romanillos y don Martin Fernandez Navarrete. Mejorado notablemente en este período el estado de órden establecido en la distribucion de las rentas del ha podido atender ya con desahogo á sus ocupaciones, promover los adelantos de la historia de España. sus intereses, por el Reino, la Academia dirigidas siempre á El arreglo de la copiosa biblioteca del Cuerpo ha ocupado una parte considerable de su cuidado. Enriquecida por la generosidad y diligencia de los Académicos que nos precedieron, habia participado de la inquietud y agitacion de los tiempos posteriores. Los inteligentes en esta materia conocen las dificultades que presenta, el mérito que tiene, y la utilidad que presta el arreglo cabal de una gran biblioteca. El celo con que ha promovido esta empresa nuestro actual dignisimo Director, iguala al que ha mostrado disponiendo tambien el arreglo del monetario y de los manuscritos académicos. En medio de estas tareas oscuras, pero no por eso menos útiles, de la Academia, se ha impreso el tomo VII de sus Memorias. Empieza por el elogio histórico del doctor Benito Arias Montano, uno de los varones mas sábios y piadosos que ha producido España, y comprende la primera parte de los apuntamientos acerca de las relaciones diplomáticas de nuestro rey don Felipe II con la reina Isabel de Inglaterra: asunto de grande interés, en que el tesoro de las noticias escondidas hasta ahora en el real archivo de Simancas, contribuye á ilustrar del modo mas autorizado y seguro el importante reinado de aquel Principe; y en que despues que esté concluida la segunda parte hasta el fallecimiento de aquella célebre Reina, adquirirá esta parte de la historia una claridad que han ofuscado á la par la pluma, no siempre imparcial, de nuestros escritores, y la envidia y mala fé de los extrangeros. La verdadera idea que debe formarse acerca del origen del Monacato religioso en la Península, y otros asuntos curiosos, componen el resto del tomo presente; y se queda disponiendo la continuacion de otros, para que ya están preparados copiosos materiales, entre estos la coleccion de las inscripciones antiguas del reino de Valencia, obra de nuestro difunto académico el excelentísimo señor Príncipe Pio; las memorias sobre la historia y numismática árabes del señor Gonzalez; otra sobre el estado civil de los Judíos durante varias épocas en España, por el señor Salvá; el elogio del arzobispo de Tarragona don Antonio Agustin, por el señor Baranda; la apología del rey don Pedro III de Aragon, por el señor Lopez; el discurso del señor Sans de Barutell sobre la campaña y sucesos de la armada aragonesa en el año de mil trescientos cincuenta y uno; y la descripcion del sitio y ruinas de Cástulo, por el señor Mazas. El celo de la Academia no se ha contentado con el trabajo, que podemos llamar ordinario, de sus Memorias. No tiene olvidada su antigua empresa de publicar las obras del rey don Alonso el Sábio; y tranquilizados ya los tiempos y aumentados sus recursos ha vuelto su atencion y tareas á la impresion de los códigos legales de aquel monarca. Ha acabado de apurar, aunque inútilmente, todas las diligencias imaginables para encontrar un ejemplar auténtico del Fuero Real de los que el Rey Sábio repartió á muchos pueblos del reino: pero se publicará en breve este código por copias antiguas y respetables, junto con el Espéculo de las Leyes, otra obra legal inédita del mismo monarca. La edicion de la crónica del rey don Fernando IV el Emplazado se ha enriquecido y continua enriqueciéndo con un copioso número de documentos, que unidos á las eruditas observaciones y trabajos de varios señores Académicos, especialmente de nuestro individuo correspondiente el señor don Manuel Acosta, darán un especial mérito á esta empresa; la cual, aunque ha participado de la lentitud natural en las de los cuerpos literarios, compensará con su perfeccion el retardo del tiempo consumido en ella. Los documentos remitidos del archivo general de la Corona de Aragon, acerca de los ajustes de paz hechos por el rey don Fernando IV con su competidor don Alonso de la Cerda, bajo la mediacion de los reyes don Juan de Aragon y don Dionis de Portugal, son sumamente importantes para ilustrar la historia de la pretension de los Cerdas á la Corona de Castilla, que fue uno de los incidentes mas ruidosos de aquel reinado. Otra empresa ha nacido en este último período de la historia de la Academia, que es la edicion de la crónica del rey don Enrique IV de Castilla: empresa cuya ejecucion presenta singulares dificultades, por las mutuas contradicciones de los coronistas de aquel Príncipe, y por el desconcierto de un reinado lleno de revoluciones y desgracias, pero al mismo tiempo de sumo interés por su conexion con el gobierno de los Reyes Católicos, y con los sucesos posteriores de la monarquía. La Academia, sin descuidar el recoger las crónicas é historias coetáneas, unas mas y otras menos conocidas, para sacar la verdad del cotejo de todas ellas, ha tomado por guia principal en este escabroso y oscuro camino, la luz que prestan las cartas y documentos diplomáticos de aquella época; y en fuerza de las esmeradas diligencias de sus individuos, tiene ya formada una coleccion de monumentos inéditos, que continua aumentándose, y que llamará sin duda la atencion y aun la admiracion de los inteligentes cuando llegue el caso de publicarse. No se debe omitir en demostracion de la gratitud de la Academia, que habiendo dispuesto con ocasion de esta empresa que pasase un individuo suyo á reconocer la biblioteca de manuscritos del monasterio del Escorial, ha encontrado en aquella Real casa la mas grata acogida, y los auxilios conducentes para el desempeño de su comision. Ha tenido motivos la Academia para mudar de dictámen en órden á la publicacion de la historia de las Indias por el obispo de Chiapa don Bartolomé de las Casas, que tenia anunciada anteriormente. Estos motivos han sido lo pesado de su estilo, lo inoportuno de sus digresiones, la extravagancia é incoherencia de sus ideas, y la puntualidad con que el diligente coronista Antonio de Herrera, vertió, y muchas veces á la letra, cuanto hay de importante en la historia de Casas; con otras consideraciones que persuaden que esta obra es una de aquellas que no tienen ya mas valor que el de su rareza, y pierden todo el que tienen desde el momento en que se imprimen. Entretanto ha dado la` Academia algunos pasos para preparar la edicion de la historia general de las Indias escrita por Gonzalo Fernandez de Oviedo, inclusa la parte de ella que está sin publicar todavia. Esta obra por la notoria sinceridad de su autor y por el cuidado con que se aplicó á describir la historia natural y civil de aquellos dominios, debe contribuir en gran manera á los adelantos de su historia: otras tareas nas urgentes y ejecutivas han suspendido su impresion hasta ahora. Tales han sido los trabajos del cuerpo en comun: referir los particulares en que se han ocupado los Académicos para ilustrar los diferentes ramos de nuestros anales, es obra larga pero forzosa, como parte de la deuda que debe pagarse á su celo, y del tributo de honor á que se han hecho acreedores. La coleccion de los viages y descubrimientos que hicieron por mar los españoles desde fines del siglo XV, empezando por los de Cristóbal Colon y de los compañeros de su hazaña Hojeda, los Pinzones y otros, acompañada de los documentos, que aclaran, rectifican y autorizan la relacion de los sucesos, y escrita con la mas esmerada crítica bajo los auspicios del Gobierno, ha acabado de fijar las opiniones sobre varios puntos esenciales de aquella brillante época de la historia española. Esta obra, clásica en su línea, ha difundido copiosa luz, que ha reflejado ya en los escritos de los extrangeros, aumentando los títulos de la justa celebridad que gozaba su autor el señor don Martin Fernandez Navarrete. La memoria sobre la historia de nuestra marina" y navegacion; la noticia crítica sobre el florentin Américo Vespucio, y juicio de las relaciones que publicó de sus viages, con muchas particularidades de su vida y familia, desconocidas hasta ahora, que resultan de nuestros archivos y de otros documentos inéditos; la noticia biográfica del célebre don Alvaro Bazan, primer marqués de santa Cruz, y la de don Cenon de Somodevilla, marqués de la Ensenada, restaurador de nuestra marina militar en el siglo pasado, son otras tantas pruebas de la erudicion de nuestro Director, cuya lectura ha ocupado agradablemente la atencion de la Academia en varias de sus juntas. Lo mismo ha sucedido con las memorias para la vida del maestro Fray Luis de Leon, recogidas con mucha diligencia por nuestro difunto compañero el maestro Fray Antolin Merino. En ellas ha encontrado la Academia la demostracion de que la pátria de aquel sábio maestro de la lengua y poeta filósofo, no fue la ciudad de Granada, como se habia comunmente creido, sino la villa de Belmonte en la provincia de Cuenca. Por otro conducto muy diverso ha adquirido la Academia la noticia de què el maestro Leon cultivó tambien el arte de la pintura. Asi lo expresó el famoso pintor sevillano Francisco Pacheco en el elogio que puso al pie de su retrato, entre otros que dibujó y existen en la coleccion que presentó al conde duque de Olivares, y conserva original nuestro individuo correspondiente don Vicente Avilés, médico de la villa de Fuentes en la provincia de Sevilla. Se han leido asimismo durante las sesiones académicas las cartas manuscritas del maestro Fray José de la Canal, en que vindica la memoria de sus predecesores en la composicion de la España Sagrada los maestros Florez y Risco, contra las rígidas censuras de sus opiniones acerca del mérito de las historias Compostelana y del Cid Campeador, escritas ambas en el siglo XII, que hizo el padre Juan Francisco Masdeu en su Historia crítica de España. Esta lectura ha influido en la eleccion de las cuestiones históricas para los premios publicados por la Academia, de que se hablará en su lugar oportuno. El público disfruta ya del Censo de poblacion de la Corona de Castilla en el siglo XVI, obra de grande importancia para la historia de la Estadística española, en que nuestro compañero el señor don Tomas Gonzalez, aprovechando los papeles é instrumentos del archivo general de Simancas, ha facilitado el desengaño acerca de los numerosos errores que eran comunes en esta y otras materias de nuestra Económica. Ni se debe omitir el justo elogio de su laboriosidad en la publicacion de las copiosas colecciones de documentos concernientes á las provincias Vascongadas y á las minas de Guadalcanal, como asunto de tanta conexion con la historia de la legislacion, y de la industria antigua española, cuyo conocimiento ha promovido el Gobierno en estas empresas desempeñadas bajo su proteccion y á sus expensas. Omitiendo otras composiciones de menos extension 'que han presentado á la Academia varios de sus individuos, mencionaremos el discurso sobre el voto de Santiago, en que el señor don José Ortiz, dean que fue de la iglesia colegial de san Felipe de Játiva, apuró cuanto se ha dicho y puede decirse sobre este punto considerado históricamente. El señor don Bruno Vallarino, al tomar posesion de su plaza de indi viduo honorario, leyó un docto discurso sobre la necesidad del conocimiento de la historia para la inteligencia y aplicacion de las leyes en el ejercicio de la magistratura. El maestro Fray Lorenzo de Frias leyó una erudita disertacion acerca de la abundancia de minas de oro y plata en España, demostrada por los testimonios de los antiguos, y por las investigaciones tanto del Gobierno como de los particulares, hechas en tiempos modernos. El señor don Antonio Lopez de Córdoba, entre otras noticias curiosas que suministró á la Academia sobre los autores griegos que hacen mencion de los españoles, entregó una memoria en que se trata de lo que la literatura europea debió á los árabes que dominaron en la Península. El señor don Miguel Salvá presentó un discurso en que manifiesta la incertidumbre de la opinion de los que creyeron que Anibal fue natural de una de las islas Baleares, fundados en un texto no bien examinado ni entendido de Plinio: y asimismo una noticia de los sucesos y varia fortuna del arzobispo de Toledo don Fray Bartolomé de Carranza. El señor don Santiago Estefanía remitió un papel de reflexiones sobre la situacion de los antiguos pueblos de Atiliana, Barbariana y Graccurris, mencionados en el Itinerario de Antonino; como igualmente varias memorias para la vida del rey don Alonso VI de Castilla y Leon. Ha visto la Academia concluida, y desea ver impresa, la Biblioteca de escritores catalanes, compuesta por el académico don Felix Torres Amat, en que este infatigable literato ilustra la gloria de su pátria. Y ha oido en sus juntas la lectura de sus Memorias para la vida del ilustrísimo señor don Felix Amat, arzobispo que fue de Palmira académico nuestro. y Recibió tambien la Academia una disertacion de su individuo don Juan de Carrion, en que describe el territorio de la villa de Coin, y habla de los monumentos romanos y árabes que hay en su término, de sus despoblados, de su nombre antiguo y de sus monedas. El señor don José María de Murga remitió una memoria sobre la série de los reyes de Navarra anteriores al siglo XI, en cuyo oscuro y dificil asunto se han ejercitado antes de ahora, con mas o menos acierto, las plumas de distinguidos escritores. |